Diseño paisajístico con capas cobertoras

Simona Vespucio Miér Oct 17, 2012 2:34 pm

Diseño
paisajístico con capas cobertoras

Unos arriates con
sus capas cobertoras bien dispuestas mejoran el aspecto de cualquier jardín.
Sin embargo, además del aspecto, una capa cobertora ofrece muchas otras
ventajas. La capa cobertora protege el sistema radicular de las plantas y añade
al suelo sustancias nutrientes muy necesarias. La capa cobertora reduce la
erosión de la capa de tierra vegetal del suelo. Aunque tender esta capa pueda
parecer pesado, le ahorrará bastante trabajo más adelante, porque impide el
crecimiento de maleza y retiene la humedad; además, le permite dedicar menos tiempo
a quitar la maleza y regar el jardín, y más tiempo a disfrutar de él. Para que
la capa cobertora pueda cumplir con su función y su aspecto sea el mejor, debe
seleccionar el material más adecuado para su jardín y aplicarlo correctamente.

Lowe's se complace
en proporcionarle esta información como otro más de nuestros servicios
para usted.

Las capas
cobertoras pueden clasificarse en dos grupos: orgánicas einorgánicas.

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	Los senderos cubiertos reducen la necesidad de trabajar en el jardín

Las capas
cobertoras orgánicas proceden de fuentes naturales. Enriquecen el suelo
mediante su descomposición.

La composta es uno de
los mejores abonos orgánicos por los beneficios que rinde al suelo, pero
un medio tan rico es también un caldo de cultivo excelente para las
malezas. Algunos tipos de composta no son muy agradables a la vista. Si le
importa el aspecto, use composta como corrector del suelo y busque un
material visualmente más atractivo para cubrirlo.
El césped cortado no
le faltará en ningún momento mientras dure la temporada de poda, pero deje
que seque antes de usarlo. Extiéndalo en una capa muy ligera. El césped
cortado seco se apelmaza si la capa es muy gruesa. No use nunca briznas
cortadas de un césped que haya sido tratado con herbicida. Lo mejor es
añadir al montón de composta briznas sin tratar o usarlas como abono
orgánico en el huerto. Rico en nitrógeno, el césped puede constituir una
buena capa cobertora.
Las hojas se dan en
abundancia y se consiguen gratis en muchas zonas. Es mayor su eficacia y
mejor su aspecto cuando se han desmenuzado parcialmente o se encuentran en
descomposición; de lo contrario, salen volando o forman una alfombra
cuando llueve. Las hojas apelmazadas forman una barrera que impide que el
aire y la humedad lleguen al suelo que cubren.
El aserrín está
disponible en muchas zonas. Si es posible, use aserrín que tenga más de un
año. El aserrín fresco puede absorber el nitrógeno si se mezcla con el
suelo. No obstante, si el aserrín se echa sobre la tierra, no habrá
problemas con el nitrógeno. Observe las plantas y añada un fertilizante
rico en nitrógeno si es necesario.
Las astillas y virutas
resultan agradables a la vista y poseen todas las virtudes de una buena
capa cobertora. Como el aserrín, es aconsejable usar material un poco
envejecido, en descomposición. La capa cobertora de madera, si no ha
envejecido convenientemente o no la revolvemos periódicamente, puede
contener toxinas y ácidos dañinos para las plantas jóvenes. El abono de
madera también puede propiciar una infestación de hongos.
La corteza sevende
en trozos, pastillas o triturada. La corteza es uno de los materiales de
abono orgánico más bonitos (y caros), así que más vale usarlo en las zonas
más visibles. El pino, el cedro y los cipreses son las variedades más
comunes. Además de su buen aspecto, la corteza ofrece una buena protección
contra la maleza y retiene la humedad. Además, las tabletas de corteza
duran años.
La paja es la caña
seca del cereal cosechado. Es ligera y, por tanto, no siempre de fácil
aplicación. Tiende a salir volando. Se descompone con rapidez y debe, por
tanto, sustituirse más a menudo que otras capas cobertoras. Debido a su
aspecto, no es la opción preferida para el entorno del jardín. No
obstante, la paja es un buena cobertora para las zonas de césped recién
sembradas.
El heno, la caña de las
hierbas, se confunde frecuentemente con la paja. El heno suele contener
semillas, por lo que hay que usarlo con cuidado. Tanto la paja como el
heno aportan sustancias nutrientes a las plantas y son eficaces en el
huerto, ya que facilitan la tarea de arrancar la maleza.
Las agujas de pino se
venden en pacas, como la paja, lo que facilita su transporte y aplicación.
Son duraderas y bonitas.
La tierra vegetal que
se vende en los centros de jardinería suele ser composta empacada, un buen
corrector del suelo.
El estiércol también
puede utilizarse como corrector del suelo. Si lo emplea como capa
cobertora, asegúrese de que esté seco y bien descompuesto. El olor no será
un problema, pero su aspecto puede dejar bastante que desear. El estiércol
contiene a menudo semillas: es una buena razón para añadirlo al montón de
composta.
El papel periódico o los
pedacitos de papel se pueden conseguir fácilmente y se descomponen con
rapidez. Los periódicos pueden usarse en hoja o hechos trizas. El papel es
más apropiado para el huerto que para el jardín, a menos que lo cubra con
otro abono orgánico más agradable a la vista. La tinta de color no es
buena para las plantas, así que no use cómics o revistas.
Los abonos orgánicos de la
zona son subproductos de las granjas o de la industria que varían en
función de la región. Los más destacables son las cáscaras de nuez
pecanera, cacahuates, coco y arroz, olotes, hierbas de sal y semillas de
algodón. Todos son eficaces y en general asequibles. Infórmese de los
recursos locales en el Servicio de Extensión del condado o estatal.

Las
capas cobertoras inorgánicas están fabricadas por el hombre. Son
efectivas y rara vez tienen que reemplazarse, pero no devuelven nada al suelo.

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	Puede usarse plástico negro o transparente.

El plástico calienta
el suelo e impide el paso del aire y del agua. El desarrollo de las
plantas se acelera debido al aumento de calor y a la humedad retenida bajo
la capa de cobertura. Puesto que el plástico es un material sólido, la
humedad debe proceder de un sistema de riego subterráneo o de un riego a
mano cuidadoso. Puede usarse plástico negro o transparente, que
normalmente se vende en rollos. El negro es opaco, mientras que, por lo
que se sabe, el plástico transparente puede dejar que la maleza germine y
crezca debajo. El plástico tiene el inconveniente de que puede
sobrecalentar las raíces de las plantas o retener demasiada humedad,
especialmente si el plástico está cubierto con una capa de abono orgánico
para presentar un mejor aspecto. El plástico puede congelarse, por lo que
quizá sea necesario retirarlo en otoño. Si se utiliza en las pendientes,
cualquier material que se coloque encima acabará por resbalarse o la corriente
se lo llevará. El plástico es adecuado para los huertos.
El ladrillo o la piedra
ofrecen un aspecto cuidado pero no combinan bien con con todos los diseños
paisajísticos. Sirven hasta cierto punto para controlar la maleza. El
ladrillo y la piedra (especialmente en los tonos más claros) reflejan el
calor hacia las plantas, lo que las puede dañar. Esta capa cobertora es,
sin duda alguna, muy duradera. Tenga cuidado: si hay ladrillos o losas
desparramadas por el césped, pueden constituir un peligro a la hora de la
poda.
La tela de diseño
paisajístico (conocida como geotextil) se adquiere en rollos y
proporciona un buen control de malezas. Además, a diferencia del plástico,
la tela permite que el aire y la humedad penetren en el suelo y lleguen a
las raíces de la planta. En general, es la mejor cobertura inorgánica para
un uso a largo plazo. Las raíces pueden enredarse en la tela, por lo que
debe asegurarse de eliminar la maleza tan pronto como aparezca.
La cobertura de hule se hace partiendo
hule en pedacitos, generalmente de llantas recicladas. Esta cobertura es
muy limpia. Es común añadir color para imitar a la madera. El coste
inicial puede ser superior al de otras coberturas, pero se trata de un
producto extremadamente duradero.

Aplicación
de la cobertura

Una vez decidido
qué material va a utilizar, es hora de extenderlo. Aquí le damos algunos
consejos:

Cuando llega el calor
queremos que el jardín ofrezca su mejor aspecto, así que echamos mano de
la cobertura. Pero procure no extenderla demasiado pronto en primavera.
Dejeque el suelo se caliente. Si echa la capa cobertora
demasiado pronto retardará el proceso de calentamiento. Normalmente, la
mejor época es desde mediados hasta finales de primavera.
La zona deberá estar libre de
malezas antes de echar la capa cobertora.

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	Procure dejar una distancia de una o dos pulgadas entre la capa cobertora y los troncos de los árboles o tallos leñosos.

Si va a extender la capa
alrededor de las plantas, riéguelas primero.
Una razón por la que ponemos
la capa cobertora es para controlar y eliminar las malas hierbas. La capa
cobertora puede hacerles lo mismo a sus plantas, así que tenga cuidado y
no les eche encima una capa demasiado gruesa.
Para evitar que se pudran los
tallos y la corteza, deje la capa cobertora a una distancia de una o dos
pulgadas. Si la capa cobertora está en contacto con las plantas, las
plagas de ratones y babosas pueden encontrar unos escondrijos perfectos y
comida gratis.
Normalmente, cuanto más
grandes sean los trozos, más profunda debe ser la capa. Las capas
cobertoras más finas se descomponen más rápidamente.
Las plántulas pueden abrirse
paso a traves de una capa cobertora delgada, pero si la capa es demansiado
gruesa puede ser impenetrable. Antes que nada deje que se desarrollen
primero las plantas. Luego podrá añadir más una vez que se hayan asentado.
Una capa cobertora demasiado
gruesa propicia que el crecimiento radicular se produzca en la misma capa
y no en la tierra. El sistema radicular resultante estará demasiado
expuesto a sufrir los rigores del frío y la sequía.
En cuanto a su aspecto,
considere el tamaño y el estilo de la zona en la que va a colocar la capa
cobertora. Por ejemplo, los trozos de corteza de pino son demasiado
grandes para una cama de anuales, pero perfectos para echarlos en torno a
unos árboles o unos arbustos.
Los senderos, las pendientes
y las zonas propensas a las inundaciones o vientos fuertes requieren
cuidados especiales. En esos casos procure echar materiales más grandes o
más pesados.
Quizá tenga que echar una
capa adicional: en el verano para retener la humedad y en invierno para
aislar del frío.
Si el jardín tiene una capa
cobertora invernal, vaya retirándola gradualmente a medida que suben las
temperaturas. Si las retira de golpe, las plántulas tiernas que están
creciendo podrían verse afectadas por un último golpe de frío a finales de
la estación.
Si lo desea, puede aplicar la
mayor parte de las capas cobertoras orgánicas a finales de la temporada
para mejorar el suelo.

¿Qué
cantidad usar?

Una capa de 1-2" de
material fino será suficiente; mientras que con material grueso la capa
deberá ser de 4". Una capa demasiado gruesa de ambos materiales puede
sofocar las plantas. En zonas donde desea que no crezca nada,
extienda la capa tan gruesa como pueda.
La cobertura varía enormente
en función del tipo de capa que use y su grosor.